karelis zambrano
Humberto
Moré
Pintor, escultor y muralista esmeraldeño nacido
en 1929, y cuyo nombre de pila fue Lalot Rivadeneira Plata.
Su vocación artística se empezó a manifestar
desde su más temprana edad cuando descubrió que los colores de los juguetes le
producían satisfacción y emoción; luego fueron el teatro y el cine las
expresiones que lo envolvieron, y, finalmente, se acercó al dibujo copiando
figuras y fotografías de revistas, las tiras cómicas de los periódicos y los
anuncios del cine.
A los veinticinco años de edad, convertido en un
artista autodidacto, presentó su primera exposición en Milagro y la segunda en
Guayaquil, en la joyería “Esmeraldas”.
Fue contemporáneo de Enrique Tábara, Luis Molinari y Estuardo Maldonado, es
decir, de esa selección de artistas jóvenes que iniciaron la renovación de la
plástica guayaquileña entre las décadas del 50 y del 60.
Original en todos sus conceptos, definió sus
inicios como “expresionismo diferente”, al que siguió luego una tendencia a la
geometrización apoyada en círculos y valorada en colores luminosos; de allí
pasó a una estilización post-cubista, basada en un criterio que lo llevaría a
obtener el Primer Premio en el Salón de julio, de Guayaquil, en 1962.
Estudioso del arte contemporáneo ecuatoriano, a
mediados de la década del 60 se involucró en lo que él llamó “Signología
Funcional”, y diez años más tarde, en Quito
La mayor parte, por no decir casi toda su vida, la vivió en Guayaquil,
donde desarrolló y “dio rienda suelta” a toda la fuerza expresiva de su arte
inigualable. Su obra presenta una expresión innovadora apoyada en el dibujo de
trazo grueso, iluminado con colores casi primarios en los que predominan el
azul y el rojo. También pintó paisajes y retratos con particularísimo y
personal estilo, e hizo esculturas modulares, de hierro y hormigón, que
sirvieron para adornar y dar perspectiva artística a varios parques de
Guayaquil, que –lamentablemente- hoy han desaparecido.
Fue un personaje polifacético –de rara valía- en
quien se conjugaron todas las manifestaciones del arte. Fue pintor, escultor,
teórico, crítico, editor y un destacado y conspicuo miembro de la Casa de
la Cultura.
Víctima de un violento cáncer, murió en Cuba,
donde había viajado en busca de atención médica, en 1984.
yuliana narvaez
Eduardo Kingman Riofrío
(Loja, 1913
- Quito, 1998) fue un pintor ecuatoriano.
Hijo segundo del Dr. Edward Kingman y de doña Rosa Riofrío, fue matriculado en la escuela anexa al normal Juan Montalvo donde realizó la primaria, pero como dibujaba desde niño, al terminar el primer curso de secundaria en el Mejía decidió cambiarse a la Escuela de Bellas Artes.
En 1933 expuso con Antonio Bellolio en la última muestra de Allere Flamma, al año siguiente hizo varios cuadros que vendió en el salón municipal “Mariano Aguilera” de Quito.
En junio del 46 expuso en el Museo de San Francisco. La revista Time, le coloca entre los grandes pintores de Hispanoamérica, luego fue a Nueva York y expuso en la Unión Panamericana de Washington. En el l 49 expuso en el Museo de Arte Colonial, veintiséis oleos con motivos populares y colores frescos, briosos, alegres. En el 55 expuso en Guayaquil. El 56 en Bogotá y en Caracas. Para el 74 había expuesto en la Maxwell Galleries de San Francisco.
Reconocimientos
En 1953 obtuvo el I premio del quinto salón de Artes Plásticas. El 59 ganó el Primer premio en el “Mariano Aguilera” con “Yo el prójimo”, visión aterradora de un mundo en crisis. El 73 le fue concedida la medalla al mérito Artístico de la Municipalidad de Guayaquil y el 75 la condecoración Nacional al Mérito con el grado de Comendador.
Tendencia artística
Su carrera comenzó como pintor expresionista por sus ideas político-sociales. El tema del dolor y maltrato indígena, ocupará en gran parte la tendencia de este artista. Se hizo célebre por las grandes y poderosas manos de sus personajes, símbolo desasosegado de fuerza. El tema de las manos, se repite en casi todos sus cuadros, esto le ha ganado la reputación de ser “el pintor de las manos”.
Hijo segundo del Dr. Edward Kingman y de doña Rosa Riofrío, fue matriculado en la escuela anexa al normal Juan Montalvo donde realizó la primaria, pero como dibujaba desde niño, al terminar el primer curso de secundaria en el Mejía decidió cambiarse a la Escuela de Bellas Artes.
En 1933 expuso con Antonio Bellolio en la última muestra de Allere Flamma, al año siguiente hizo varios cuadros que vendió en el salón municipal “Mariano Aguilera” de Quito.
En junio del 46 expuso en el Museo de San Francisco. La revista Time, le coloca entre los grandes pintores de Hispanoamérica, luego fue a Nueva York y expuso en la Unión Panamericana de Washington. En el l 49 expuso en el Museo de Arte Colonial, veintiséis oleos con motivos populares y colores frescos, briosos, alegres. En el 55 expuso en Guayaquil. El 56 en Bogotá y en Caracas. Para el 74 había expuesto en la Maxwell Galleries de San Francisco.
Reconocimientos
En 1953 obtuvo el I premio del quinto salón de Artes Plásticas. El 59 ganó el Primer premio en el “Mariano Aguilera” con “Yo el prójimo”, visión aterradora de un mundo en crisis. El 73 le fue concedida la medalla al mérito Artístico de la Municipalidad de Guayaquil y el 75 la condecoración Nacional al Mérito con el grado de Comendador.
Tendencia artística
Su carrera comenzó como pintor expresionista por sus ideas político-sociales. El tema del dolor y maltrato indígena, ocupará en gran parte la tendencia de este artista. Se hizo célebre por las grandes y poderosas manos de sus personajes, símbolo desasosegado de fuerza. El tema de las manos, se repite en casi todos sus cuadros, esto le ha ganado la reputación de ser “el pintor de las manos”.
linda salto
Oswaldo Viteri
Artista
neofigurativo, ampliamente reconocido por su trabajo de ensamblajes, aunque su
obra abarca también la pintura, el dibujo, los grabados y los mosaicos.
Comenzó su
educación como estudiante de Arquitectura en la Universidad Central del Ecuador, en Quito, en 1951. Colaboró en el taller de Oswaldo Guayasamín, a quien ayudó en 1959 en el encargo de un mural para el Ministerio de Obras Públicas.
Durante la
década de 1960, se centró en la pintura y estudió Antropología y Folklore.
Comenzó a
explorar técnicas de arte experimental incorporando a sus obras el collage y
colocando objetos superpuestos a sus lienzos. Realizó sus primeros ensamblajes
en 1968, comenzando a mostrar sus obras en
exposiciones internacionales en la década de 1960, siendo incluido en las bienales celebradas en 1964, en Córdoba (Argentina), y en 1969, en São Paulo, en las que recibió sendas menciones honoríficas.
Su trabajó
tomó una vertiente más escultórica durante los años 70, como reflejan sus
múltiples series de ensamblajes en los que utiliza muñecas de trapo y material
de desecho.
Muchas de
sus obras se encuentran en algunos de los museos y galerías más prestigiosos
del mundo, entre las que podemos destacar la galería Uffizi, que cuenta con un autorretrato.